Samsung Electronics habría detenido temporalmente la producción de su conflictivo Galaxy Note 7, después de la amplica cantidad de explosivos problemas que la batería podría estar causando en las manos de los usuarios. Esta noticia ha aparecido en varios medios de comunicación, citando fuentes familiarizadas con el asunto. Mientras tanto, los operadores de telefonía estadounidense AT&T y T-Mobile han bloqueado las ventas del smartphone de Samsung.
"Estamos cambiando el plan de producción de la Galaxy Note 7 -dijo la compañía coreana- con el fin de tomar nuevas medidas para garantizar la calidad y la seguridad." A pesar de esta afirmación, no se menciona nada sobre la suspensión de la producción, sino que se ha dado a conocer a través de una fuente, una planta de Samsung en Vietnam, que gestiona los envíos de teléfonos en todo el mundo.
En las últimas semanas Samsung había comenzado a sustituir decenas de miles de Galaxy Note 7 por un nuevo modelo, con la intención de solucionar el problema, pero no ha sido así. En los últimos diez días se han conocido al menos cinco casos de phablets quemados y han comenzado a producir una gran cantidad de humo, lo que representa un riesgo para la salud de sus propietarios. Uno de estos casos recurrentes ocurrió el pasado 5 octubre, cuando un avión fue evacuado debido al humo producido por un Galaxy Note 7 poco antes de su salida de Louisville en Kentucky, y se trataba de un dispositivo reemplazado que, como tal, debería funcionar sin problemas.
En otro caso, una vez más en Kentucky, un hombre se despertó en su habitación llena de humo y con su Samsung Galaxy Note 7 que se había incendiado, después fue hospitalizado con bronquitis causada por el humo inhalado. También en este caso, el teléfono fue un modelo de reemplazo y ni siquiera estaba cargándose cuando se sobrecalentó. El último caso del que hay registro se remonta al domingo 9 de octubre, y tuvo lugar en Houston, Texas: el teléfono se incendió en la mesa del comedor de una familia que estaba almorzando. Fue sustituido a finales de septiembre, siguiendo las indicaciones de Samsung para la campaña de recuperación.
A raíz de estos informes, los últimos grandes operadores de telefonía móvil de Estados Unidos han decidido detener las ventas del Galaxy Note 7, proponiendo a sus clientes reemplazar los modelos defectuosos con diferentes teléfonos. Samsung no ha confirmado aún todos los casos reportados hasta el momento, emitiendo comunicados de prensa en los que afirma su compromiso para aclarar e investigar las causas de los accidentes y colaborar con las autoridades locales.
Quien haya comprado un Galaxy Note 7 antes de la campaña de recuperación, tiene derecho a solicitar un producto de reemplazo o un reembolso completo de su compra. Los nuevos modelos deberían resolver el problema, pero al parecer todavía hay problemas que podrían perjudicar aún más a las ventas de Samsung, cuando queda por delante todo el período de compras navideñas.